jueves, 20 de septiembre de 2012

La laguna enferma de Puno

Por Edgar Cutipa Quispe
E-mail: edgarcutipa@gmail.com

Está claro que nunca es buen momento para el surgimiento de amenazas ambientales, de focos contaminantes que, dadas sus características de expansión y perjuicio social (a nivel sanitario), ponen en vilo a toda la población. Hoy en día las Lagunas de Oxidación (para el tratamiento de aguas residuales) ubicadas en la isla el Espinar de la ciudad de Puno, es un espacio altamente contaminante, no solo para la bahía interior del lago Titicaca, sino también para los miles de habitantes de esta ciudad, que poseen un caótico sistema de abastecimiento de agua potable y alcantarillado.
 
Según la Empresa Municipal de Saneamiento Básico de Puno (Emsa – Puno), las lagunas del Espinar fueron construidas en el año 1972 cuando la ciudad contaba con 30 mil habitantes, en la actualidad (2012) la cifra es de 137 mil 256 según estimaciones del INEI, estas lagunas trataban entre el 40 al 45% de las aguas servidas de la ciudad. Este sistema estuvo operativo hasta el año 1986, fecha en la cual quedo inhabilitado por las lluvias que condujeron al incremento en el nivel del lago, (cota 3,812.48 msnm), originando la inundación respectiva.
 
Sin embargo, es necesario recordar que a mediados de la década de los 90s, Emsa Puno rehabilito la colapsada laguna, ampliando su capacidad de tratamiento hasta cubrir el 70% del total de las aguas servidas producidas en aquel momento, pero a pesar de esos esfuerzos, el impacto de la descarga de las aguas servidas tratadas en la bahía a través de la mal llamada planta de tratamiento, así como las descargas libres producto de las lluvias y otras fuentes, ha conducido a la eutrofización parcial de las aguas de la referida bahía interior, provocando su desequilibrio ecológico.
 
 
El ex director de Emsa Puno, Dino Loza, expuso que en la actualidad las lagunas de oxidación sólo tratan una mínima cantidad de las aguas residuales y el resto va directamente a la bahía, incrementando considerablemente los niveles de contaminación, sin que las autoridades, activistas medioambientales y sociedad inicien una cruzada verdaderamente válida para solucionar este problema. Igualmente expreso que de no ejecutarse prontamente un moderno complejo para el tratamiento de las aguas servidas, en el mediano y largo plazo la ciudad de Puno podría ser inhabitable.           
 
Según expertos, la principal causa de este desequilibrio ambiental tiene su origen en la descarga de nutrientes (nitrógeno y fósforo principalmente) que se producen en la bahía interior de Puno, dichos nutrientes están contenidos en las descargas de aguas residuales. Las consecuencias de este fenómeno provocado por la actividad humana (eutrofización antropogénica), ha conllevado al deterioro de las condiciones estéticas del lago, se generan problemas de malos olores (casi en toda la ciudad) y por lo tanto la pérdida del valor de los terrenos  aledaños, puede provocar problemas en la utilización de los recursos (mortalidad de peces, plantas, etc) y otros problemas más severos en el futuro.
 
Ahora bien, alguna vez hemos escuchado hablar mediáticamente del pánico poblacional frente a esta situación de crisis ambiental, pero muy pocas veces hemos acudido a la zona del desastre. Miguel Cabrera, joven de 19 años del barrio Chejoña, área aledaña a las lagunas de oxidación, nos comentó que los malos olores y sensación de tragedia ambiental se perciben fundamentalmente en horas de la tarde, pues, es en ese momento cuando se presentan fuertes vientos en la ciudad. Estos vientos hacen que las olas del lago sean más grandes, que remueven el fondo del fango de la bahía interior del lago, donde están asentados los desechos de contaminación orgánica y bacteriológica, que crecen cada día producto del nulo tratamiento de las aguas servidas.
 
Distintos estudios, recogen la investigación desarrollada por la consultora Hidroservice, entidad que señaló que la Bahía interior de Puno, se encuentra en estado hipereutrófico, y que debido a sus dimensiones y flujos de agua, no tiene capacidad de recibir las aguas servidas de la ciudad, aunque tratadas a nivel terciario, lo que significa que de continuar las cosas como están en el futuro nuestros hijos pagarán las consecuencias de un pésimo sistema de saneamiento. Lamentablemente los responsables directos en solucionar este problema, como la Municipalidad Provincial de Puno, la empresa Emsa Puno y demás entidades como el PELT (Proyecto Especial Binacional Lago Titicaca)  y la ALT (Autoridad Autónoma Binacional del Lago Titicaca) no trabajan de manera coordinada en el tema.
 
Sistema de alcantarillado   
Por otro lado, como un dato adicional, y refiriéndome al sistema de alcantarillado de la ciudad de Puno, podemos señalar que Emsa Puno cuenta con 22,447 conexiones domiciliarias de alcantarillado de aguas residuales (Diciembre de 2006), de los cuales el 92.26% corresponden a la categoría doméstica, a la categoría comercial el 6.91% de instalaciones y por último el 0.82% corresponde a las instalaciones industriales y estatales. Lo que hace insuficiente el tendido de la red de alcantarillado para el transporte de las aguas servidas, además según la misma empresa municipal, las tuberías son de concreto simple, que en buena cuenta ya cumplió su ciclo de vida útil. 

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